Hater es un término empleado en Internet para denominar a los usuarios de la red que difaman, desprecian o critican destructivamente a una persona, entidad, obra, producto o a un concepto determinado, a causas poco racionales o tan solo por el acto de difamar.

De seguro usted en alguna red social se habrá encontrado con personas encajadas en ese perfil.  En el entorno de los contenidos de ciclismo el hater también está presente. Este se cuela en el chat de trasmisiones en vivo o en cometarios sobre noticias relacionadas a específicos ciclistas o equipos.

El hater está encapsulado; sigue novedades breves de un deporte, pero nunca hace un esfuerzo por comprender y aprender sobre el bello ciclismo. Las construcciones de sus argumentos se basan en arremeter contra la dignidad humana. Frente a sus ojos no hay un velo, sino muchos, es más sus ojos tan fríos y sobrios están desconectados de la vida.  

Su necesidad de estar tan pendiente de que le vaya mal a alguien ajeno (que para colmo ni siquiera conoce en persona) pone en evidencia que tan abandonado tiene a sí mismo su interior; el hater es incapaz de encontrar sensibilidad y empatía ante los sucesos emotivos en el deporte.

Hostigador con su vocabulario grotesco, solo hace alejar del ciclismo a aquellas personas que están queriendo conocer este maravilloso deporte.  Todo aquello a lo que abren camino es a los insultos y mensajes despectivos. Su aceleración para teclear en contra de alguien ratifica que no tiene nada bueno que entregar a los demás.

El hater con su postura radical se ve triunfante en su oficina o cuarto; lo que desconoce es que mientras el levanta copas de odio los verdaderos ciclistas se preparan para su próxima carrera, su etapa, su entrenamiento porque ellos si tienen objetivos claros en la vida y lo hacen todo esto obviando la existencia minúscula del hater en el escenario mundial.

Por una cultura ciclística en que podamos tener la oportunidad de dialogar si a algo tenemos que renunciar es a sufrir una metamorfosis psicológica que nos encamine a ser un hater que creo ya suficiente se tiene con las cosas de la vida. Y recuerda en vez de volverte un hater mejor prepara tu comida.

Siuuuuuu